"Un diseñador sabe que ha alcanzado la perfección no cuando no hay nada más que añadir, sino cuando no queda nada más por quitar"Antoine de Saint-Exupery
¿Qué es el minimalismo?
El minimalismo es una tendencia en diseño (cuyo origen se encuentra en Suiza) que consiste en reducir el diseño a la mínima expresión, despojando de elementos superfluos, colores, formas y texturas, sólo con sus características más básicas.
El diseño minimalista, una tarea no tan fácil
Aunque el diseño minimalista es percibido como una tarea sin esfuerzo, sólo los diseñadores gráficos sabemos que dicha tarea no es tan fácil. El minimalismo implica conceptualismo y abstracción extrema.
Todos conocemos la famosa frase de Leonardo Da Vinci: "La simplicidad es la máxima sofisticación", pero tenemos que ir con cuidado, ya que el minimalismo no es sinónimo de carencia de información. El diseño debe contener los elementos básicos para asegurarnos que el cliente recibe toda la información y no confundirlo acerca de dónde buscar o malinterpretar las prioridades de cada elemento.
También tenemos que tener cuidado con el usuario. Al igual que muchos elementos innecesarios de diseño pueden causar un lío o un caos, si no pasamos con la abstracción quizás no se entienda el concepto y por lo tanto, el mensaje.
Buscando el punto focal
Para evitar que el usuario se confunda y no sepa hacia dónde mirar, es importante definir un punto focal dentro de nuestro diseño, que aportará más relevancia al contenido.
Desde un punto de vista visual, el diseño minimalista está destinado a atraer la atención, expresar calma y llevar la mente a lo básico, reduciendo al mínimo las distracciones para el usuario.
Cualquier toque de color en un diseño en negro y blanco, por ejemplo, nos asegura la atención del usuario. El color en sí mismo se convierte en el punto focal.
En este caso, la galería de trabajos se convierte en un excelente punto focal.
¿Como minimizar el contenido?
Con el fin de ejecutar correctamente el minimalismo en el diseño, primero tenemos que enfocar.
Si intentas mantener un estilo minimalista utilizando una gran cantidad de información, el resultado será desastroso.
Antes de sumergirte en el proceso de diseño, tómate tu tiempo para considerar los elementos necesarios que son vitales para tu diseño y pensar en su jerarquía para lograr el efecto deseado.
Coge una hoja de papel y enumera la información necesaria: logotipo, datos de contacto, explicación de la empresa... olvídate del resto.
Cuando tengas la estructura pensada, toca simplificar el diseño tanto como sea posible. Evita las texturas, los colores, las formas innecesarias o mezclar demasiadas tipografías. Piensa bien en cuál será tu punto focal y poténcialo.
En pocas palabras: cuanto más solo está un elemento, más relevancia va a conseguir.
El espacio en blanco
Si lo que buscas es un diseño minimalista, es espacio en blanco será tu gran aliado.
El espacio en blanco es prácticamente sinónimo de minimalismo. Nos ayuda equilibrar los pocos elementos que aparecerán en la página.
Que lo llamamos espacio en blanco no significa que necesariamente tenga que tener ese color.
El minimalismo en el diseño gráfico no implica una falta de color, sino que exige un uso inteligente y planificado de la paleta de colores. La clave no es sólo utilizar el color, sino más bien, cómo se usa.
Al igual que un punto de color se utiliza para captar la atención, un color de fondo nos aporta sensaciones y tono.
El equilibrio, la alineación y el contraste
Si bien gran parte del efecto lo logrará el uso del espacio en blanco no debemos olvidar los fundamentos del diseño gráfico.
Para ello, tendrás que tener bien presente el equilibrio, la alineación y el contraste. Asegúrese de que su diseño se adhiere a estos principios y que no necesita más ayudas visuales para lograr su objetivo.
La tipografía, un toque de personalidad
Despojar al diseño de todos los elementos innecesarios, también significa simplificar el uso de la tipografía.
Con menos distracciones para el usuario, la mayoría del diseño se reduce al texto y éste debe mantener la atención del usuario.
Elige bien las tipografías que vas a usar y define muy bien cómo las vas a utilizar, para aportar un toque personal y característico a tu proyecto.
Algunos buenos ejemplos:
Fuente: Webdesignerdepot, Sixrevisions, Speckyboy y Minimalissimo
Gran post, enhorabuena
ResponderEliminarHola Abel!
ResponderEliminarGracias por tu comentario. Me gusta tu Tumblr!
:)